A pesar de ser solo 25 piezas requiere de concentración y agudeza visual. Los colores y la textura de la madera estimulan el tacto, ejercitan la memoria y la motricidad.
Además de ser un rompecabezas, es un juego de encastre lineal.
Es para divertir a chicos y grandes, para jugar solos o en conjunto.
La recomendación de la edad es solo una recomendación, cada niño es libre de probarlo a cualquier edad.